Saludos a todos nuestros lectores comprometidos con la salud y el bienestar. En el complejo viaje que representa el tratamiento contra el cáncer, buscamos ser su faro de información y apoyo. En este artículo, nos sumergiremos en el mundo del ejercicio adaptado, exploraremos rutinas de ejercicio adaptadas a diferentes etapas del tratamiento contra el cáncer, destacando la importancia de mantener la actividad física para mejorar la calidad de vida y la recuperación y como la actividad física puede convertirse en nuestro gran aliado.
Beneficios del Ejercicio Durante el Tratamiento:
Antes de sumergirnos en las rutinas, es vital comprender los beneficios que el ejercicio puede aportar a los pacientes oncológicos. Desde la mejora de la energía hasta la reducción del estrés, la actividad física bien planificada puede marcar la diferencia en la experiencia global del tratamiento. Algunos beneficios derivados de la prácitca de actividad física son:
- Reducción de la fatiga
- Mantenimiento de la masa muscular
- Mejora del estado de ánimo
- Control del estrés y la ansiedad
- Mejora de la Calidad del sueño
- Estimulación del sistema inmunilógico
Los desarrollamos con mayor profundidad en este artículo.
Rutinas para Pacientes en Tratamiento Activo:
Durante las fases de quimioterapia o radioterapia, debemos adaptar las rutinas para mantener la fuerza, movilidad y la flexibilidad, si no sabes como hacero nosotros contamos con un equipo de entrenadores oncológicos cualificados que te ayudarán de la mejor forma posible. Buscamos realizar ejercicios de bajo impacto, caminar suavemente, ejercicio de fuerza, movilidad y estiramientos, estos pueden ayudar a contrarrestar la fatiga y mantener la movilidad.
Ejercicios Postoperatorios:
Después de cirugías relacionadas con el cáncer, nos enfocaremos en recuperar un mínimo de fuerza y la movilidad que iremos trabajando poco a poco y adaptándolo a tus circunstancias. Rutinas centradas en ejercicios de bajo impacto y adaptaciones para evitar la tensión en áreas específicas serán clave en esta etapa.
Ejercicio Durante la Recuperación:
Una vez concluido el tratamiento, las rutinas se adaptarán para apoyar la recuperación. Se priorizarán ejercicios suaves y progresivos, siempre prestando atención a las necesidades individuales de cada paciente, pero es aquí donde podemos empezar a incrementar la intensidad del ejercicio siempre y cuando nuestro cuerpo responda y nos lo permita.
Ejercicios para Mejorar la Energía:
Combatir la fatiga es esencial. Incorporaremos actividades que estimulen la vitalidad, como la práctica de ejercicios de respiración y relajación para mejorar la energía de manera sostenible, ejercicios cardiovasculares y trabajo de pesas enfocado a esta parte.
Entrenamiento de Fuerza para Prevenir la Pérdida Muscular:
Las rutinas de entrenamiento de fuerza combinados con una alimentación adecuada son esenciales para prevenir la pérdida muscular asociada con algunos tratamientos. El uso de bandas elásticas, pesas, material para entrenamiento con tu propio peso… permitirá fortalecer los músculos de forma segura y progresiva dándonos todos los beneficios del entrenamiento.
Ejercicios en Grupo:
Fomentar la conexión social a través del ejercicio es vital. Clases grupales adaptadas o actividades físicas en grupo pueden proporcionar beneficios emocionales significativos. Pregunta por nuestros grupos de entrenamiento oncológico y trataremos de incluirte en alguno lo antes posible.
Como puedes observar el ejercicio adaptado a cada etapa del tratamiento contra el cáncer no solo es posible, sino también beneficioso. La integración de rutinas personalizadas puede marcar una diferencia significativa en la calidad de vida y en el proceso de recuperación de los pacientes oncológicos. Si conoces algún caso cercano o estás pasando por esta situación en Active Motion contamos con un espacio donde disfrutar libremente y cuidarte sin prisas, nuestro equipo especializado en entrenamiento oncológico online y nutrición oncológica te recibirá con los brazos abiertos.
